Ya nadie es ajeno a lo que está pasando en Afganistán. Hemos visto decenas de imágenes que se vuelven a clavar en nuestras retinas y nos advierten de la catastrófica situación que vive el país afgano.
Lo que está pasando en el aeropuerto Hamid Karzai de Kabul no es otra cosa que la máxima desesperación de un pueblo que quiere salir de su país antes de verse sumido por las leyes y normas de los talibanes.
¿Quiénes son los talibanes?
Talib significa estudiante y su plural en el idioma pastún son los talibanes. Estudiantes.
Estos estudiantes forjaron, en el año 1994, un grupo islamista sunita dirigido por un veterano muyahidin para imponer las formas más extremas del islamismo fundamentalista. Desde ese momento, los talibanes sometieron a la población afgana a las más estrictas leyes islamistas en las que las mujeres son siempre las peor paradas. Con la ley de los talibanes, las mujeres son relegadas a la más absoluta invisibilidad, robando así cualquier tipo de derecho fundamental femenino. El colectivo LGTBI también es rechazado y repudiado por el régimen talibán.
¿Qué prohiben las leyes de los talibanes a las mujeres?
Prácticamente todo. Desde salir a la calle solas o asomarse a las ventanas de su casa, hasta pintarse las uñas o mostrar un milímetro de su cuerpo. No pueden trabajar fuera de casa, ni salir sin estar acompañadas por su padre, marido o hermano. Ellas no pueden asistir a ninguna institución educativa, no pueden ser escuchadas, no pueden salir en fotografías ni en prensa o televisión. No pueden maquillarse, mostrar los tobillos o usar pantalón. Jamás serán tratadas por doctores que no sean mujeres. No pueden reírse, no pueden hablar con hombres que no sean familiares directos. No pueden hacer absolutamente nada.
¿Qué pasa en el aeropuerto de Kabul?
Lo que pasa en el aeropuerto de Kabul es un intento de huida desesperada de Afganistán. Miles de personas se agolpan para salir del país ante el rápido avance de los talibanes que ya han tomado la ciudad de Kabul y declarado la victoria. Esta gente solo intenta huir de un país que hoy retrocede 20 años de golpe, que recorta derechos fundamentales y que pierde todo lo que había conseguido desde que los talibanes perdieron el control de Afganistán ante Estados Unidos, en el año 2001.
Estos últimos días hemos visto imágenes muy duras en las que vemos cómo varias personas se aferran al tren de aterrizaje de los aviones y caen al vacio en pleno vuelo. Personas que se suben a los planos del avión, que se aferran a cualquier parte del fuselaje. Vemos escenas dantescas en las que se abren paso a través de disparos para llegar a los aviones. Esto es la viva imagen de la desesperación humana.
¿Y qué ocurre con los extranjeros que están viviendo en Afganistán?
Que tienen que ser evacuados a la mayor brevedad posible. Esto implica enviar aviones desde sus respectivos países hasta Kabul, que los talibanes permitan el paso al aeropuerto y que consigan despegar los vuelos.
Muchos españoles se encuentran en estos momentos escondidos en domicilios y esperando a ser evacuados. Se prevé evacuar a todos los españoles y a afganos que han colaborado con España en misión militar en los últimos años.
Toda nuestra solidaridad al pueblo afgano para evitar una nueva crisis humanitaria y todos nuestros pensamientos con las mujeres afganas a las que se les va a privar de todos sus derechos fundamentales. Que las creencias políticas y religiosas no sigan generando guerras y sometiendo pueblos.